Uno piensa que nunca caerá, pero siempre se llega su momento, no por falta de inteligencia, sino más bien por confianza e inocencia. A mi me pasó alguna vez y no fue hasta entonces que aprendí a ser más cauteloso, analizar bien las cosas, incluso tomar una segunda o tercer opinión de alguien más experimentado.
Gracias por darnos esta información. Saludos!
|